Hotel reformado y con parking.

el hotel está bien ubicado, a un paso del centro y en una zona tranquila. la cama es súper cómoda y la habitación tiene buena iluminación. el personal fue muy amable y nos ayudó a solucionar el problema del check-in rápido. el desayuno es decente y tiene varias opciones.

la habitación es un poco pequeña y el baño podría ser más espacioso. tuvimos un par de inconvenientes con el check-in y el acceso a algunas áreas.

1 Cama cómoda
2 Buena ubicación
3 Desayuno variado

1 Acceso complicado
2 Baño pequeño

La cama era gigante y extremamente cómoda, lo que hizo mi descanso perfecto. La ubicación es super accesible, pero el baño era un poco pequeño. 👍

Buena opción económica en el centro

La ubicación es perfecta, puedes caminar a todos lados. El personal es muy amable y siempre listo para ayudar. Las camas son cómodas, pero el mantenimiento de las habitaciones deja mucho que desear, había cosas rotas que deberían arreglar. Ah, y el WiFi es un poco lento, lo cual es un fastidio. Pero la verdad, ideal para un viaje corto.

La experiencia culinaria fue un festín! Los pescado y papas fritas en Le P'tit Tonneau fueron algo épico. Además, la ubicación del hotel es ideal para pasear y disfrutar de buenos vinos en Le Jeroboam Vins & Tartines.

El check-in locamente complicado y dejar las maletas me hizo sudar un poco. Pero con todo y eso, el hotel brilló con su personal amable y habitaciones limpias.

La habitación doble ofrece un diseño bastante básico pero práctico. El acceso al hotel está estratégicamente ubicado, permitiendo a los viajeros caminar al centro sin complicaciones, lo cual es un punto positivo para quienes buscan comodidad.

El check-in fue problemático, ya que a nuestra llegada no había recepcionista disponible y la máquina no funcionaba correctamente, lo que obligó a resolverlo a través de teléfono y fue un poco frustrante. Durante nuestra estancia en pleno verano, el ventilador no fue suficiente para combatir el calor, además, las ventanas carecían de persianas, lo cual dificultaba la privacidad y el descanso. El baño era sumamente pequeño, con un lavabo justo al entrar, y la distribución de las habitaciones parecía un poco extraña al estar en un edificio separado detrás del garaje, además de tener escaleras bastante incómodas para acceder.

Las camas eran súper cómodas y la ubicación es ideal, a un paso del centro. Además, tienen un parking que es oro puro para aparcar en esta ciudad.

El wifi era más lento que una tortuga con jet lag.

La habitación no era muy grande, pero la cama doble era gigante y súper cómoda. La limpieza bien, aunque el baño un poco pequeño. Algo que me gustó fue la tina, perfecta para relajarse. Además, el acceso a la habitación no era muy fácil, ya que no había ascensor y las escaleras eran empinadas. En resumen, un lugar acogedor, aunque con algunos detalles a mejorar.

Recomendada para viajeros sencillos

Las instalaciones eran cómodas y modernas, las camas eran grandes y la ubicación estaba muy cerca del centro y de líneas de bus. El desayuno era mejor que en otros hoteles

No fue barato, pero aún así aceptable

La ubicación es buena. Las camas son cómodas. El desayuno tiene variedad y se puede comer al aire libre. Tuvimos un problema con el check-in, ya que no había recepcionista cuando llegamos y tuvimos que solucionar la situación por teléfono. Eso fue un poco difícil debido a la barrera del idioma.

El acceso a la habitación es complicado y el baño es pequeño.

El WiFi era lento, pero la TV de pantalla plana fue útil. Se permiten mascotas.

La ubicación es excelente y tener parking en el mismo lugar es muy práctico. Las camas son confortables y el desayuno ofrece una rica variedad que incluye pan de soda irlandés. Sin embargo, el acceso a las habitaciones puede ser complicado sin ascensor, y el baño es más pequeño de lo que esperaba. La conexión WiFi fue bastante lenta durante mi estancia.